La exposición de obra con cierto rigor técnico y que en principio podríamos calificar de "figurativa", asegura una atracción y comprensión para casi todo tipo de público lo que le permite introducir mensajes, pensamientos o simplemente elementos que provoquen en el espectador distintas reacciones: desde sorpresa hasta rechazo, pasando por indiferencia o reconocimiento y aceptación entusiasta. |
|